Insuficiencia Renal: ¿Cuándo se recurre al trasplante de riñón?

Considerar que un riñón no funciona correctamente depende de la edad y sexo de la persona. Para definirlo se utiliza la medida de lo que se llama el filtrado glomerular. Para personas jóvenes se considera normal por encima de 80 ml/min aproximadamente y para personas de edad avanzada por encima de 60 ml/min. Por debajo de esta última cifra suele considerarse que la persona tiene insuficiencia renal. Sin embargo, la función renal será suficiente para eliminar agua y sustancias de desecho del organismo mientras el filtrado glomerular se mantenga por encima de 7-8 ml/min. Por debajo de esta cifra necesitamos diálisis o trasplante renal.

¿Será entonces cuando se recomiende el trasplante de riñón?

Efectivamente. Siempre y cuando sea posible, el trasplante renal es la mejor opción de tratamiento de la insuficiencia renal terminal. Mejor aún sería encontrar un donante vivo en la familia que permitiera trasplantarse sin necesidad de un paso previo por diálisis.

¿Qué condiciones deben darse para que un paciente pueda ser receptor?

El receptor ha de tener unas condiciones físicas mínimas que le permiten pasar un proceso de anestesia y quirúrgico sin alto riesgo de fallecimiento. Al mismo tiempo ha de poder recibir con garantías un tratamiento inmunosupresor destinado a evitar el rechazo del órgano trasplantado y que le va a bajar las defensas frente a infecciones y algunos tipos de tumores.

Una vez hecho el trasplante, ¿qué cuidados deberá llevar a cabo el paciente?

Los cuidados postrasplante son múltiples aunque deben permitir llevar una vida totalmente normal al paciente. En general se resumirían en tomar correctamente la medicación prescrita, dieta equilibrada, ejercicio físico, evitar el tabaco y el alcohol, control del azúcar y del colesterol y consultar al médico cualquier nueva medicación prescrita por otros especialistas en Nefrología.